Capítulo 709
Capítulo 709
Capítulo 709
-¡Bien dicho! – Fernando estaba emocionado y golpeó la espalda de Alejandro tan fuerte que casi
lo hizo vomitar.
Hubo un momento de silencio en el otro extremo del teléfono, luego una risa suave y palabras de
aliento: -Muy bien, es genial que tengas ese deseo. Hermano mayor te deseo que puedas
reconciliarte con Clara y que todo vuelva a ser como antes. 1
-Gracias, hermano mayor-respondió Alejandro en voz baja. Sin embargo, por alguna razón, las
palabras de su hermano Álvaro lo hicieron sentirse incómodo. NôvelDrama.Org is the owner.
Fernando tomó el teléfono y sonrió de manera amigable y cordial. -¡Álvaro! ¿Cómo va la vida en el
extranjero? He oído que las playas doradas allí son hermosas. ¿Cuándo nos llevarás a mí y a tu
abuelo de vacaciones allá para tomar un poco de sol?
-Abuelo, aunque la vida en el extranjero es buena, no es igual como estar en casa-respondió
Álvaro con suavidad. -El abuelo, usted está envejeciendo, y el viaje a Estados Unidos es bastante
largo. No quiero que se fatigue. Quizás, no pasará mucho tiempo antes de que mi salud siga
mejorando un poco más, y prometo encontrarnos en México.
Alejandro no mostró ninguna reacción, pero su corazón latía inexplicablemente rápido.
-¡Muy bien! Si Álvaro puede regresar, eso sería maravilloso. Tendremos una reunión familiar-dijo
Fernando con gran cariño. -Pero tampoco te esfuerces demasiado, Álvaro. El abuelo conoce el
estado de tú salud. Incluso si no regresas, el abuelo no te culpará. El abuelo puede visitarte con
frecuencia, solo son unas pocas horas en avión privado, no te cansarás.
Después de una breve conversación, colgaron el teléfono.
-¡Papá, Álvaro acaba de decir que quiere regresar! ¿Es verdad? – Enrique estaba emocionado y
preguntó rápidamente.
Fernando parpadeó y antes de que pudiera responder, Adrián entró golpeando la puerta.
-Clara, Rodrigo y Noa han llegado.
-¿Noa también está aquí? Que bien- Enrique se sorprendió al ver que Noa y Rodrigo ya habían
entrado. Además, la mano grande de Rodrigo sostenía la pequeña y hermosa mano de Noa, sin
ninguna reserva. Noa, tímidamente, se escondió detrás del hombre, con la carita ruborizada de
vergüenza.
Clara los había observado llegar hasta aquí, sintiendo cierta molestia en su corazón, pero no podía decir nada al respecto. Si dos personas se enamoran, no podía ser ella quien los separara. El amor
es impredecible.
-Rodrigo, ¿qué estás haciendo? – Enrique miraba fijamente a la pareja joven y hermosa, con las
manos entrelazadas tan firmemente que su sorpresa interior no era una broma.
-Tío Enrique-Rodrigo sonrió ampliamente.
Noa, con la mano en el pecho, miraba fijamente a su amado Rodrigo. Antes, Rodrigo solía llamar tío
a Enrique, pero ahora le llamaba tío abuelo, lo que parecía demasiado íntimo.
Enrique estaba perplejo, al ver a esta pareja. -Rodrigo, ¿qué significa esto?
Rodrigo respiró profundamente, levantó la mano entrelazada con Noa y dijo con firmeza: -Tio
abuelo, Noa y yo estamos profundamente enamorados. No puedo contener mi gran amor por su
pequeña y hermosa hija.
Noa y Alejandro se cubrieron la frente al mismo tiempo, pensando: ¿quién le enseñó a este tipo
estas palabras hipócritas?
-Rodrigo, mejor cálmate-Noa no podía soportarlo más y apretó su mano.