Capítulo 7
Capítulo 7
Dorian estaba en una reunión con su telefono al lado Cuando escucho el sonido de una notificación, echo un
vistazo y vio un mensaje de texto de Cintia Se quedo mirando un segundo de mas
Yael, que estaba en medio de su presentación era muy bueno para leer la sala. Se detuvo en seco y sin poder evitarlo, echo una mirada furtiva al teléfono de Dorian Solo alcanze a ver el nombre “Amelia antes de que su jefe volteara el teléfono boca abajo sobre la mesa y lo mirara fijamente
Yael se sobresalto, pensando que Dorian se iba a enfadar, pero solo lo vio darle una mirada fria y distante This belongs © NôvelDra/ma.Org.
Sique
Con nerviosismo, Yael asintio y termino de explicar su propuesta de diseño Pero apenas termino, Dorian. Truncio el ceño:
Quién aprobo esa basura de propuesta?”, preguntó con voz baja, pero con suficiente fuerza como para tensar aun mas el ambiente del ya tenso salon
Yael se quedo mudo, dudando y mirando a Dorian sin saber que decir
Dorian miro al resto esperando una respuesta.
Todos bajaron la mirada, pretendiendo estar profundamente concentrados, temiendo encontrarse con su mirada
Nadie puede decir nada?”, pregunto Dorian
Nadie se atrevio a hacer un ruido
Las miradas suplicantes se dirigieron en secreto hacia Yael.
Yael, el asistente personal de Donan y vicepresidente de la compañía, siempre estaba en la linea de fuego en las reuniones, especialmente ultimamente
Incluso la persona mas despistada notaria que algo andaba mal con Dorian No es que se hubiera vuelto. irascible o quisquilloso, sino que parecia llevar consigo una presion atmosferica baja, era inusualmente exigente con el trabajo y su mirada era gelida
Lo mas importante era que parecia tener amnesia, como si estuviera distraido
Yael, sintiendo la presion de todas esas miradas, quiso desaparecer. Puede que normalmente pudiera manejar la situación, pero ¿podría esta vez?
Mientras intentaba hacerse aun más pequeño, Dorian lo miro siguiendo la dirección de las miradas de todos. “Ya que todo el mundo te esta mirando. Yael, responde tu Dorian dijo y luego miro el diseño de arquitectura europea en la pantalla detrás de el Quien aprobo esta basura de propuesta?
Yael no dijo nada.
Todos lo estaban dejando en la estacada.
Dorian lo miró: “Yael?”
Con valor, miró a Dorian: “Yo no lo sé.”
No tuvo el coraje de decirlo.
Dorian lo miró y luego a los demás
Todos sequian con la cabeza baja, fingiendo concentración.
“Sr. Hugo, tú dime Dorian eligió a alguien al azar.
El Sr Hugo, asustado, miró a Yael y luego le devolvió la pregunta: “El Sr. Yael estabp a cargo de este provel to ”
Capitulo 7
Dorian volvió la mirada a su asistente: “Yael.”
Yael miró a sus colegas, que seguian fingiendo tomar notas y luego dudó al mirar a Dorian.
Su jefe dijo: “Habla claro.”
Yael, mordiéndose la lengua, finalmente habló: “Fue usted, Sr. Ferrer, quien aprobó la propuesta.”
“Anoche”, agregó en voz baja.
El silencio se apodero de la sala de reuniones,
Yael robó una mirada a Dorian, viendo un atisbo de sorpresa en su rostro normalmente guapo.
Dorian miró de nuevo el diseño detrás de él.
Observando su expresión con cuidado, Yael agregó: “Sr. Ferrer, ha estado un poco fuera de si estos días, ¿está bien?
“Estoy bien. La expresión de Dorian volvió a la normalidad. “Lo siento, fue un descuido de mi parte. La propuesta se rehara. La reunión ha terminado.”
Al terminar, Dorian agarró su teléfono y salió de la sala.
Cuando la puerta se cerró, la tensión en la sala se disipó.
Los demás le dieron a Yael un pulgar hacia arriba.
“Valiente.
Yael señaló con los dedos: Siempre los cubro y en el momento crítico me dejan solo, ni uno de ustedes tiene
conciencia”
“Es que tú eres el único que puede manejar el carácter del Sr. Ferrer,” le respondieron.
“Señor Yael, te has fajado hoy. Un día de estos los chicos y yo te invitaremos a comer.”
Todos se rieron y respondieron de buena manera, pero no pudieron evitar sentirse confundidos, ¿Será que el Señor Ferrer ha tenido algún problema? Últimamente está raro.”
“Claro, también lo noté, además se queda como ido.”
“Yo también lo creo, nunca habia sido asi, ¿será que algo pasó en su casa?”
Las miradas chismosas se dirigieron una vez más hacia Yael.
“No es nada, ¿qué le va a pasar al Señor Ferrer? Yael desvió el tema con facilidad, “Con la pasión que le pone al trabajo, es normal que a veces su cuerpo no aguante y se quede como ausente”
Mientras hablaba, ya había terminado de organizar los materiales de la reunión y después de bromear un poco más con todos, regresó a su oficina.
Su oficina estaba fuera del despacho de Dorian y había otros asistentes trabajando ahi. Normalmente hablaban de su trabajo con tranquilidad, pero cuando pasaba Dorian, todos se ponían serios, se
enderezaban y no se atrevían a mirar a otro lado. Sin embargo, esa seriedad se relajaba al ver entrar a Yael, todos se tocaban el pecho como aliviados:
El asistente, sonriendo, tomó algunos documentos y golpeó con ellos la cabeza de algunos de ellos diciendo: ¡Que acthud
Todos le tenian miedo a Dorian, Yael lo sabia, incluso él mismo
No era que Dorian tuviera un mal temperamento, al contrario, era alguien que casi nunca se enojaba. Aunque era un adicto al trabajo, no esperaba lo mismo de sus empleados, era considerado con ellos y les ofrecia
mecres condiciones que la competencia. Nunca se enojaba sin motivo y tampoco les qutaba lo que les correspondia Se podia decir que era un jefe bastante bueno, pero tal vez era su presencia tan imponente
empre serio y parco en palabras que hacia que nadie se atreviera a descontrolarse en su presenc
Eso debia ser la presencia de alguien con autoridad, penso Yael, mientras su mirada cruzaba la oficina y se posaba en Donan
Dorian acababa de sentarse en su silia de oficina y habia lanzado su teléfono móvil al rincón del escritorio
claramente de mal humor
Yael supuso que tenia que ver con la palabra “Amelia” que había visto de reojo antes
Había tenido un par de encuentros breves con Amelia y tenia una buena impresión de ella. Era quapa, con un aire inocente y obediente, tranquila y sencilla Hablaba con voz suave y calmada, agradable al
oido, no era impaciente ni delicada, trataba a las personas con cortesia y buenos modales, no como la madre de Dorian. Cintia, que se comportaba como la gran dama que era
Yael sabia del divorcio de Dorian porque él mismo habia contactado al abogado, pero no sabía por qué se estaban divorciando
Solo sabia que su jefe habla estado actuando extraño últimamente y eso se había vuelto más frecuente y grave despues de que le dijo que Amelia queria vender la casa, al punto de que Dorian ni siquiera recordaba los planes que habia aprobado
Aunque Yael y Dorian tenian una buena relación además de ser jefe y empleado, no sabia nada sobre la vida emocional y marital de Dorian, pues él no compartia nada al respecto
No conocía bien a Amelia, pero siempre le habia parecido que su relación era bastante estable. No eran una pareja melosa, pero tampoco parecian desgraciados hasta el punto de necesitar un divorcio
Yael aún recordaba el dia que Amelia vino a la empresa y Dorian le pidió que la llevara a comprar libros. No. parecia que hubiera habido ningun problema entre ellos
Pero a pesar de que parecian una pareja sin problemas y bien avenidos, al día siguiente le habian pedido inesperadamente que ayudara con los tramites de divorcio
Después de un momento de silencio, Dorian volvio a mirar su teléfono desechado en un rincón, se detuvo por un instante y luego tomo el teléfono Abrio WhatsApp y vio el mensaje de Cintia, abrió la foto y de inmediato vio a Amelia mirando ausente hacia la barra de un bar y a un hombre mirandola a ella de la misma manera
Se quedo quieto por un momento, observando la foto de los dos
Bajo la tenue luz, el modo retrato de la cámara capturo cada detalle de la mirada, vivida y en su punto Como hombre, Dorian entendia muy bien qué significaba esa mirada fija en Amelia, no era asombro ni un interés pasajero, sino un amor profundo y ardiente, intenso y pegajoso
Dorian no tenia ni idea de quien era ese hombre, no lo conocía, ni había visto su foto en el celular de Amelia. Los dedos largos de Dorian hicieron una pausa sobre el celular y recordó que ni siquiera habia revisado el celular de Amelia ¿De dónde sacaba si lo había visto o no?
no podia ver que habia en el celular de Dorian, solo veia como sus oscuros ojos se volvían más y más acagados mientras miraba el celular, como si pudieran helar, su guapo rostro perdiendo expresion hasta ser casi inexistente, pero con una calma extrema, una calma que te recordaba a Yaei la superficie del mar antes
istente penso que Dorian iba a armar una escena, pero lo vio tomar el teléfono y decir “Es alguien que yo e sente no fe metas donde no te llaman
Juego apeed celular y le two a un lado, llamando Yaei!”
saprast, ponende sene Sr. Ferris, en qué puedo ayudario?
Douan levantó la vista: ¿A qué hora quede con el St. Isaac? ¿Ya llego?”
El asistente asintió rápidamente. En diez minutos, ya está en la sala de conferencias.”
“Está bien.” Dorian asintió, recogió los materiales de la reunión de la mesa y se levantó, “Ven conmigo”
Yael asintió: “De acuerdo”
Pero no pudo evitar mirar de reojo al celular abandonado en la mesa y con cautela le recordó “Sr. Ferrer, si surge algo urgente, yo podria…
No es necesario!” Dorian lo interrumpió con tono frio, ya se habia marchado.
Yael vacilo, miro el celular dejado atrás y no tuvo otra opción que sequirlo