Chapter 103
Chapter 103
Novia falsa.
No podia parar de golpear el suelo con mi tacón, los nervios estaban atacando cada parte de mi cuerpo y no sabia si era porque en solo minutos comenzaba el lanzamiento de mi marca o porque esperaba que mis abogados se comunicaran para darme las buenas
nuevas sobre el caso de Rachel.
Tenia el alma en un hilo y no podia concentrarme del todo en este evento tan importante en el que habian invitados influyentes en
la industria de la moda, queria que fuera un éxito, que fuera una noche inolvidable, pero no estaba segura de poder lograrlo con todo lo
que tenía encima este dia.
Estás quedando radiante, Zafiro se ha lucido con tu vestido. Abby llegó a mi camerino, donde los estilistas terminaban de
peinarme y maquillarme. Ahora que mi amiga lo mencionaba, centré mi atención en mi imagen y sonrei satisfecha por el resultado.
En realidad, estaban haciendo un buen trabajo, sin embargo, no veía la hora de que terminaran para poder verificar que todo estaba
en orden con las modelos y los diseños que iban a presentar al público, y aunque mis socios se estaban encargando de ello, queria
comprobar por mi misma que todo marchaba como lo esperado.
Miré el reflejo de Abby en el espejo y sonrei al ver lo hermosa que lucía, el vestido color azul resaltaba su delgada y esbelta figura a la
perfección, su cabello estaba atado en una cola alta que dejaba expuesto su cuello, luciendo elegante y delicada. Con facilidad, podria
captar la atención de todos.
Tú estás preciosa, por poco no te reconozco.
halagada a la vez.
bromeé un poco y ella hizo un ademán con la mano como si estuviera apenada y
Humildemente, se hizo lo que se pudo. Debo estar a la altura, y es que, afuera está lleno, veo muchos rostros conocidos, no puedo
que tantas figuras reconocidas hayan aceptado la invitación sin ni siquiera conocer el nombre de la persona detrás de L&J, esto es
tan emocionante. -Abby parecia extasiada por esta noche y yo deberia estar de la misma manera, de no ser por la incertidumbre que me
agobiaba y no me dejaba respirar con normalidad.
Me quedé en silencio, mientras terminaban de aplicarme labial rojo que combinaba con mi vestido color guinda, los estilistas. culminaron su trabajo conmigo y me levanté de la silla para darme un último vistazo, el maquillaje y el peinado estaban tan bien elaborados, que tenia miedo de estropearlo.
–
– Gracias. le agradeci contenta a los estilistas que comenzaban a guardar sus implementos y me giré para poder mirar frente a frente a Abby. Hay que darle créditos a nuestra relacionista pública, lo demás corre por nuestra cuenta, asi que no debe haber ni un solo error. Iré a ver cómo van los preparativos, ¿vienes conmigo?-le pregunte a Abby, mientras terminaba de acomodar mi vestido.
–
¡Vaya! En serio quedaste fantástica, no puedo apartar mis ojos de ti, eres una diosa. Apartense todos, la diosa Doinel va en camino. negué divertida con mi cabeza, mientras tomaba mi celular, con la esperanza de recibir noticias antes de iniciar el evento y me
pavoneé en mis tacones rumbo a la salida.
Me lo creeré si lo vuelves a decir. -dije al pasar al lado de Abby y antes de dar un paso fuera de mi vestidor, Abby me detuvo tomando mi mano, la miré con curiosidad, encontrándome con una sonrisa nerviosa.
Aquella expresión la conocia muy bien y sinceramente, me daba miedo cualquier cosa que estuviera por decirme.
Sari, mi diosa, antes de ir al camerino de las modelos, quiero que sepas que te tengo una sorpresa que te va a alegrar el día, bueno, la noche. -me solté de su agarre cuando soltó aquello y enarqué una ceja al mismo tiempo que me cruzaba de brazos.
Claro que tenia motivos para temer, las sorpresas de Abby podian dejarte sin aliento, se podía esperar cualquier cosa viniendo de ella, es por eso por lo que en este momento no sabia qué pensar, ahora lo que menos queria era una sorpresa de mi amiga, terminaria sufriendo tres infartos.
-Abby…
No, no, no, esta sorpresa te va a encantar. -me interrumpió al darse cuenta de que no estaba de ánimos para sus locuras, antes de tirar de mi mano para que la siguiera e hice mi mayor esfuerzo por confiar ciegamente en ella, me estaba preparando mentalmente para no perder la cabeza con su sorpresa. -Ahora si estamos completas. -no entendi muy bien a lo que se referia con aquello segundos antes de abrir la puerta del camerino de las modelos.
La mayoria de las modelos estaban listas y ensayando para su presentación, algunas terminaban de ser maquilladas por los
estilistas, sonrei satisfecha al ver que todo marchaba de maravilla, bajo la supervisión de Hugo, Vincent y mi diseñadora estrella,
Zafiro.
La verdad, seguia sin saber cual era la sorpresa de la que Abby hablaba, pero pronto, me guio con ligeros empujones a uno de los
tocadores donde una modelo estaba siendo maquillada y rodeada por un grupo de tres modelos que hablaban animadamente con
Vincent y Hugo.
Miré el reflejo en el espejo de la rubia que me daba la espalda y mis ojos se abrieron de par en par al reconocer ese rostro que no veía
hace años.
¿Britney? —la rubia me observó por el espejo y una sonrisa apareció en su rostro antes de girar su silla dejando su maquillaje a
medio terminar. No podía creer que ella estaba aqui, habia perdido comunicación con ella hace más de tres años, cuando tuvo que
marcharse a Londres por su trabajo como modelo. ¡Estás aqui!
De todas las sorpresas que Abby me ha dado, esta era la mejor, incluso me hizo olvidar por un momento de las preocupaciones que
me tenian tan inquieta.
-¡Sarah!-se levantó de su silla de un salto y corrió a abrazarme, haciendo caso omiso a los estilistas que le advertian que
arruinaria su trabajo, yo no me detuve y la recibi en mis brazos dando saltitos de emoción. ¡Sorpresa!- dijo divertida cuando nos
soltamos y no pude dejar de mirarla, usaba el vestido y las joyas que estaban preparados para el cierre de la pasarela, entonces lo
comprendi todo.
No me digas, no me digas. -mi sonrisa se ensancho y Abby confirmó lo que deduje con solo ver a la rubia de ojos color miel.
Qué mejor que cerrar el lanzamiento con la mejor modelo. – la emoción no me cabia en el pecho, pues Britney era tan reconocida
e influyente como todos los invitados al lanzamiento, su imagen seria muy favorable para L&J.
¡No te lo puedo creer! -cubri mi boca para no soltar un grito de emoción frente a todos.
Créelo y de no haber sido por Abby, no me hubiese enterado de esto y de… todo. -hizo una pausa, mientras su expresión
cambiaba a una de pena y mi sonrisa se esfumó de inmediato. Tenia que ser Abby. -Sari, lo siento por lo de tus padres, ya verás como
pronto estarán de vuelta y todo esto quedará como un mal momento, mientras tanto, tienes que darlo todo con tu nueva empresa y
darle un buen golpe al idiota de Paul. Es un miserable. Jamas me imaginé que fuera capaz de hacer algo asi, yo juraba que estaba
enamorado de ti.
Hasta yo que soy su hermana me lo crei, pero fue todo un engaño, ahora tengo que soportar ver su cara todos los dias en casa,
solo para sostener la mentira de la demanda en contra de Sarah. Dios, esto es agotador.-Abby habló con pesadumbre, pues después de
la pelea en Doinel y de leer la carta que mis padres se encargaron de que recibiera, le pedi que se quedara unos dias en la mansión Dubois
para no levantar sospechas, confiando en que el juicio de Rachel diera resultados positivos, asi como esperaba que mis padres no se
tardaran con sus planes.
Britney nos miró con diversión en su rostro antes de hablar.
-Hubiese pagado por ver esa pelea, lástima que nadie las grabó, ¿es que se olvidaron de grabar? Pésimo servicio. -Abby y yo
soltamos una risa por la decepción en su voz y los estilistas le pidieron a Bri que regresara para terminar de trabajar en su imagen, pues
ya estábamos sobre la hora.
-Anda, ya tendremos tiempo para ponernos al dia. Pero antes, un abrazo grupal. -Abby habló emocionada y las tres nos
abrazamos. Ya estamos completas y espero que esta vez dure más tiempo que la última vez.
– Oh, aquí estás, novia mia, te estuve buscando. -la voz de Bastián nos hizo separar y Britney me miró interrogante por como mi
primo le habia llamado a Abby antes de mirarla con la boca abierta de arriba abajo, parecia que se hubiese quedado sin palabras al ver a
su novia falsa.
Necesitamos mucho tiempo para ponernos al dia. dijo Britney antes de volver a su silla.
Abby, estás… estás, ¿eres Abby? ¿Eres mi novia?-Bastián no sabia ni qué decir y escuché un carraspeo de garganta detrás de mi,
seguido de una risita.
Me giré para ver a los hermanos de Bastián, quienes simulaban hablar de algo importante, aunque Hugo no podia disimular tan bien con la risa que amenazaba por volver a escapar y el rostro sonrojado
de Vincent lo dejaba en evidencia, mientras intentaba aflojarse la corbata que parecia que lo estaba asfixiando.
Celos, celos y más celos.
Aproveché el momento para acercarme a Vincent y disfrutar en primera fila de su ataque de celos.
Qué idiota eres, de verdad, ¿no estás viendo que soy yo? -Bastián volvió a mirarla de pie a cabeza y Abby aprovechó para dar una
vuelta, haciendo que la cola de su vestido se abriera y la apertura dejara a la vista su pierna izquierda.
Estás hermosa, muy hermosa. -volvi a escuchar como el hombre al lado de mi se aclaraba la garganta sin poder ocultar su
incomodidad ante las palabras de Bastián, este ultimo se acercó a Abby para tomarla de la cintura y susurrar algo en su oido que nadie
más que mi amiga pudo escuchar.
-¿Está aquí? ¿Ya viene? -Abby preguntó mientras miraba a la puerta como si fuese a abrirse en cualquier momento y supe que
hablaban de la exnovia de Bastián. -Bueno, manos a la obra.
Hermano, solo tengo una cosa que decirte. Camarón que se duerme, lo cambian por el novio falso. - Hugo habló con tono burlon
y no pude evitar reirme.
– Hacen linda pareja. le segui el juego a Bastian, echándole más leña al fuego, Y es que, no estaba de acuerdo con lo que hacial
Vincent, estaba en un constante aprieta y afloja, si no se decidia a expresar sus sentimientos pronto, perderia a la única mujer por la que
se ha interesado de verdad.
No sé qué está esperando para lanzarse.
Miré a Vincent, quien se sirvió un vaso de whisky que estaba sobre la mesa detrás de nosotros, el cual era exclusivo para el equipo de
L&J al terminar el lanzamiento, pero a él no le importo y se bebió el liquido de un solo trago, sin apartar la mirada de la pareja que
estaban más cerca que nunca, pues su primera actuación como novios estaba por comenzar.
-Solo van a fingir, a ella no le gusta Bastián. -Vincent habló en voz baja, como si estuviera hablando para él, pero por supuesto que Hugo y yo lo escuchamos.
Puede que no, pero a Bastian comienza a gustarle Abby. -miré sorprendida a Hugo por lo que acaba de decir y Vincent también lo
miraba, pero con evidente preocupación mezclado con enojo. -Estás en problemas hermano, sabes como es Bastián cuando comienza a sentir algo por una mujer, solo mira lo que está haciendo por su exnovia, Yo que tú, doy esta batalla por perdida.
Vincent tragó en seco, haciendo que su manzana de Adán se moviera de arriba a abajo y volvió a servirse otro vaso de whisky que se
tomó en un santiamén.
Podré perder una batalla, pero no la guerra. -Vincent susurró para si mismo, pero logré escucharle y no pude evitar emocionarme
porque esto se ponia cada vez mejor.
La puerta se abrió y Sofia, mi relacionista publica, entró junto a una pareja y reconoci a la mujer de inmediato, la rubia de ojos. avellanas, era la presentadora que cubriria el evento, esa era la exnovia de Bastian, y por la cercania que tenia con el hombre de traje impecable que la acompañaba, seguramente se trataba de su prometido.
Sofia me llamó para saludar a Jane, pues debía conocer a la persona que presentaria como la Gerente General de L&J al finalizar el desfile. Después de intercambiar unas palabras, volvi con mis primos, no queria perderme de la actuación de mi amiga y mi primo, mucho menos de la reacción de Vincent.
Esto va a estar bueno.
Deberia estar asegurándome que todo va en orden afuera, pero esto no me lo pierdo por nada del mundo. -dije mientras me cruzaba de brazos observando a la falsa pareja que se alertaron por la presencia de Jane y su prometido, y Bastián acercó a Abby a su pecho con una mano en su cintura y la otra acariciaba cariñosamente la piel descubierta de su cuello.
Voz.
Estaban tan conectados el uno con el otro, que cualquiera creeria que son pareja de verdad.
¿Bastián?-la mujer reconoció a Bastián, aunque el le estaba dando la espalda y se giró sin soltar la cintura de Abby al escuchar su
Hace falta unas palomitas de maiz para disfrutar mejor de la función. -Hugo bromeó al lado de Vincent, quien comenzaba a frotar su mano en la cara con incomodidad y frustración.
Jane. Qué sofpresa verte por aqui. Bastian fingió estar sorprendido por la presencia de su exnovia.
No podia negar que hacia buena pareja en todos los sentidos con Abby, ambos tenían una parte alocada y serios en los momentos que lo amerita, decian to que pensaban sin antes pasar por un filtro y en cuanto a actuación, los dos podrían ganarse un premio, lo hacian con tanta naturalidad, como si lo llevaran en la sangre.
– Esto es una payasada. Vincent se giró hacia la mesa, como si no quisiera ver lo que pasaba unos metros más allá. -Esta estupidez solo seria en la fiesta de compromiso de Jane. Los dos son unos inmaduros. -no dejaba de quejarse mientras Bastián y Jane
intercambiaban palabras y unos segundos después, Abby estrecho la mano de la rubia con una sonrisa en su rostro.
No sabia que ya tenías novia, que lindos. -Jane hablaba con una sonrisa que se podia notar a kilómetros que era fingida y miraba Copyright Nôv/el/Dra/ma.Org.
a Abby como si quisiera comérsela viva, pero mi amiga lucia tan radiante y segura de sí misma, mientras acariciaba con ternura el
hombro de Bastián.
–
Gracias, Jane, que linda. -Abby habló como si le agradara la mujer, aunque podia ver desde aqui que le caia como patada en el
estómago. —La verdad es que nos enamoramos desde que éramos unos adolescentes, pero por cuestiones del destino, nos separamos
sin tener la posibilidad de ser más que amigos, y ahora que nos hemos reencontrado, no lo dejaré escapar.
Abby abrazó a Bastián por el cuello para mirarlo con ojos de amor, como si de verdad estuviera enamorada de él y él la miraba del mismo modo, con una sonrisa perfecta que dejaba a la vista su pequeño hoyuelo.
Bien dicen que todos los caminos llevan a Roma. -las dulces palabras de Bastián hicieron que Vincent soltara una risa sin gracia, que solo dejaba en evidencia su malhumor y me quedé paralizada en mi lugar boquiabierta y con los ojos abiertos de par en par con lo
siguiente que vi.
Debo estar alucinando.