El despertar del Dragón

Capítulo 2325

¿Qué has hecho?

Los ancianos que habían escuchado su conversación compartían la misma frustración. Juraron deshacer el conjunto arcano y demostrar a todos que eran capaces de hacerlo.

De repente, la puerta de piedra empezó a parpadear, emitiendo una ráfaga de intensa energía. Uno de los magos ancianos no pudo esquivar el ataque y le cortaron la cabeza. Belonging to NôvelDrama.Org.

La sangre salpicó a los demás magos ancianos. Sus rostros estaban llenos de asombro e incredulidad.

—¿Qué acaba de pasar? —preguntó Emiliano atónito.

—E-Esto... —El mago que antes había afirmado poder desmantelar la formación con éxito se quedó atónito y sin palabras.

—Ya te lo he dicho. Aunque te dieran un mes, no serías capaz de deshacer esta formación arcana. Tu intento de romper la formación por la fuerza es erróneo, sobre todo porque la Formación Trampa Mortal está entretejida en ella. ¡Romperla con fuerza bruta solo te llevara a la muerte! Así que ahora que sabes lo aterradora que es esta formación arcana, ¿aún quieres continuar? —dijo Jaime con calma.

Todos los magos de la Secta Vientofuerte retrocedieron al instante, manteniéndose a distancia de la puerta de piedra.

Su reacción frustró aún más a Emiliano.

—Jaime, has dicho que puedes resolver esto en un minuto, ¿verdad? Pues bien, adelante, inténtalo. Si lo consigues, te concederé la autoridad para distribuir los tesoros —le dijo Emiliano a Jaime mientras movía la cabeza.

Debido a lo difícil que era desentrañar la formación, existía la posibilidad de que Jaime muriera en el proceso. Por eso Emiliano accedió al intento de Jaime.

—Si lo hubieras dicho antes, ya habría abierto la puerta de piedra —respondió Jaime con una sonrisa antes de caminar en dirección a la puerta.

—¡Tenga cuidado, señor Casas! —dijo Alba.

—No se preocupe. Sé lo que hago —Jaime le dedicó una sutil sonrisa.

Se plantó ante la puerta de piedra y puso las manos sobre ella.

Todos los espectadores jadearon al verlo. Estaban ansiosos por ver lo que Jaime podía hacer.

Luol y Arán también prestaron mucha atención a Jaime, pues querían ver cómo podía romper el conjunto arcano en un minuto.

Las manos de Jaime emitieron un rayo dorado que atravesó la puerta de piedra. Al mismo tiempo, las intrincadas líneas de la matriz arcana comenzaron a brillar y resplandecer.

Zuuuum...

En un instante, un deslumbrante rayo dorado brotó de la puerta de piedra junto con un aura amenazadora, pero Jaime lo absorbió en un abrir y cerrar de ojos.

Todos los demás empezaron a retroceder tras percibir el aura abrumadora.

Emiliano se echó a reír.

—¿Ves? Esto es lo que pasa cuando eres tan engreído. Dijiste que ibas a desmantelar la matriz arcana, pero en vez de eso, activaste la matriz de Trampa Mortal. Seguro que vas a morir.

Alba no pudo evitar lanzar una mirada preocupada a Jaime y apretó los puños.

Mientras tanto, Luol y Arán observaban de cerca la puerta de piedra y sintieron que el aura amenazadora no parecía provenir de la Matriz de Trampa Mortal.

¡Crish!

De repente, el crujido producido por el movimiento de la puerta de piedra hizo que a todos les recorriera un escalofrío por la espalda.

Jaime abrió poco a poco la puerta. El aura emitida no le causó ningún daño.

Al abrirse la puerta, un viento helado recorrió las profundidades de las antiguas ruinas del Palacio de Narciso.

Todos se estremecieron.

El viento helado hizo que todos temblaran. Aquel lugar parecía más un depósito de cadáveres subterráneo que un lugar de reunión de miembros de una secta.

Sin embargo, los espectadores estaban asombrados de la notable habilidad de Jaime para abrir rápidamente la puerta de piedra.

—¿Cómo lo ha hecho, señor Casas? ¿Cómo consiguió desentrañar la formación en tan poco tiempo? —Luol tenía curiosidad por saber cómo lo había hecho Jaime.

Arán tenía la misma curiosidad.

—Jaime, ¿qué acabas de hacer? No te vimos destruir la formación arcana.

Emiliano también dirigió su atención hacia Jaime, curioso por escuchar lo que tenía que decir. La habilidad de Jaime para romper la matriz arcana dejó a todos perplejos y llenos de preguntas.